De color naranja intenso, granulado, bastante homogéneo, detectándose
únicamente algunos puntos verdes que provienen de la albahaca y pequeños
granos de nuez. Su aroma es fresco, vivo y alegre, con amplia presencia
olfativa de los dos ingredientes ya citados, además de, como es lógico,
de la propia zanahoria. Su sabor es complejo, ya que tiene matices
dulces, salados, grasos y herbáceos. Por sus características, tiene
especial aceptación entre los más pequeños. Es, sin duda, nuestro paté
más popular.