Nuestro paté tiene un color que oscila entre el negro suave y el
chocolate puro, con tonos terrosos y rojizos. Su aroma es intenso,
predominando la aceituna negra por encima de todos los demás
ingredientes.
Es una elaboración distinta de una olivada o una tapenade. Combinando
las olivas negras con tomate seco y cebolla tierna conseguimos aportar
sabor intenso y frescor natural, apreciándose finalmente la presencia de
plantas aromáticas autóctonas.